Por: Manu Álvarez Molina.
No hace mucho que David Tornay y yo somos amigos. Él es de esas personas tímidas, que no se quieren hacer notar ni destacar, pero que cuando tratas con él descubres que tiene un gran talento y sensibilidad.
A David Tornay le gusta el dibujo, las manualidades, la música y personalmente para mí, destaca mucho en la fotografía. Hijo del conocido fotógrafo Diego Tornay, el cual retrató la vida del Cádiz de los años 60, muy particularmente en el barrio de Puntales. David, ha seguido parte del legado de su padre, donde a día de hoy colabora con ciertos medios de comunicación. Cabe también citar, que David, es quien graba y edita las entrevistas que dirige este servidor. Manu.AM.
Pero volviendo con el tema, esta entrevista no es para él, sino para el ya fallecido Diego. ¿Y por qué dirán?. Bueno, en los meses que ando tratando con David, y como ya les he ido citando, me habló que su progenitor fotografió muy extensamente la vida del gaditano a partir de los años 60, y que dispone de una gran colección de instantáneas las cuales aún ni yo he visto aún, pero me producen una gran curiosidad, así como la vida del autor Diego Tornay.
FL: ¿Quién fue Diego Tornay y cómo comenzó con el arte de la fotografía?
- Diego fue un hombre que nació en la sierra de Cadiz, en Prado del Rey concretamente, y que como tanta gente tuvo que emigrar a la ciudad junto con mi madre, también de allí. Aquí ya tenía algún amigo que se había venido antes que él y que le ayudo en sus primero meses en Cadiz. Su primer trabajo, que compaginaría posteriormente con la fotografía, fue la de cobrador en los autobuses, pasando luego, durante un periodo no muy largo, a conductor, incluso sin experiencia previa de conducir coche particular.
En la fotografía no sé realmente si empezó porque le llamaba la atención y sólo como hobby o si realmente empezó con la idea de dedicarse profesionalmente a ello, pero lo cierto es que empezó con un librito, que debo de conservar por algún lado, y que le daría las primeras bases sobre la técnica fotográfica.
FL: ¿Cómo describirías el estilo fotográfico de Diego Tornay?
- Realmente no le recuerdo ningún estilo definido como tal, es decir, no buscaba ángulos imposibles ni composiciones complicadas, no buscaba la fotografía “complicada” ni original que le hiciese diferente ni con sello propio, era más bien fotografía de supervivencia, de hecho fue, con sus reportajes de bodas sobre todo, y de celebraciones familiares como comuniones y bautizos, incluso fotos de carnet con una Polaroid con cuatro objetivos (que aún conservo), lo que le permitió ganar el dinero suficiente como para sacar adelante a una familia de tres hijos, donde yo soy el menor.
No tenía tampoco unas ambiciones de ser importante ni reconocido, ni siquiera tuvo nunca un estudio fotográfico propio abierto al público en la calle. Si se alquiló un entresuelo en la calle Feduchy Nº5, supongo que con la idea de que fuese un estudio (recuerdo focos, pantallas…) pero no recuerdo ni que entrase a funcionar como tal, sino más bien como su oficina donde ordenar y organizar su trabajo para no tener que hacerlo en casa. Al terminar su etapa de fotógrafo seguimos con ese local pero ya como mi sala de estudio cuando fui a la universidad y posteriormente como mi estudio musical propio.
FL: ¿Cuál crees que fue la mayor inspiración de Diego Tornay al capturar imágenes? ¿Lo viviste de alguna forma especial?
- Era mucho de fotografiar el momento y lo que le llamase la atención especialmente por algo, como cuando empezaba alguna obra, o iba a algún sitio especial, un poco creo que como todo el mundo, no era un hombre de irse de “safari fotográfico” como a lo mejor sí hago yo, primero porque no tenía coche y su “área de trabajo” se circunscribía más bien a Puntales y sus alrededores. También por aquella época las cámaras iban a carrete, costaba un dinero curioso el revelarlos, y tampoco era plan de hacer muchos experimentos, porque se iba un dinero curioso.
A mí me cogió muy chico, no sé realmente cuando mi padre finalizó su etapa como fotógrafo oficialmente, pero debió ser a principios de los 80, pero sí recuerdo las llamadas de teléfonos de clientes, de la mesa del salón llena de fotos de los reportajes y mi madre ayudando a montar los álbumes. También recuerdo de acompañar a mi padre al laboratorio a recoger las fotos, a Cadiz Color (que estaba en la avenida Marconi) y a otro estudio en San Antonio.
FL: ¿Cuál consideras que es la importancia histórica de las fotografías de Diego Tornay? Dado que retrató la vida en Cádiz durante una época específica, ¿cómo crees que sus imágenes contribuyen al conocimiento histórico y cultural de la ciudad?
-Debe de ser de cierta importancia, al menos por la zona de Puntales, porque muchas fotografías las veo a veces en esos videomontajes que suelen hacerse con fotografías antiguas de Cádiz. De Puntales en concreto tengo fotografías, sobre todo, de los años 60,70 y 80 ,por ejemplo del primer bloque de lo que sería el relleno del Club Alcázar, con una grúa en una barcaza en el agua, o del primer Club Alcázar, cuando era solo una simple choza. También fotografías de edificios que ya hace mucho que no existen,como el grupo de Calderón,y otro que existía donde está ahora el patio del antiguo Colegio Carranza.
FL: ¿Cómo influyó la relación entre tu padre Diego Tornay y tú en su trabajo? Considerando que sigues de alguna forma parte del legado de tu padre, ¿cómo crees que esta conexión familiar afectó la perspectiva y la creatividad de ambos?
-Realmente no sé si él pensó en que alguno de sus hijos siguiese su carrera. Mi hermana sí que empezó a ayudarle e incluso realizó ella misma algunos reportajes de bodas, pero pocos trabajos le recuerdo yo a ella, y creo que en eso influyó el carácter de ambos. Mi padre sí empezó con la fotografía casi por necesidad, o porque vio una salida profesional que podría valer, pero además él tenía un carácter muy tranquilo, paciente y muy sociable, sin embargo ella no aguantaba, quizás, muchas “tonterías” que hay que aguantarle a mucha gente que confunden el hecho de que por estar pagando un servicio ya tienen el derecho de “ordenar” y pensar que estás a su servicio. Se une a eso el hecho de ser mujer, y es un tema que no he hablado nunca con mi hermana, si sufrió algún tipo de machismo o comentario tonto típico que se hace cuando llevas 3 copas en un convite.
FL: Por la época destacaban otros fotógrafos, como lo fue Juman o Kiki ¿Por qué Tornay, no tiene el renombre de estos otros autores?
-Mi padre no fue nunca un fotógrafo de prensa, no sé si porque no le interesaba, si no le dejaban o si ese cupo estaba ya cubierto. También en aquella época los fotógrafos (o esa es la impresión que a mí me daba) tenían su “zona de caza” muy bien delimitada, y en Loreto por ejemplo estaba Fariñas,con el que sí recuerdo que tenían buena relación, incluso se pasaban bodas cuando coincidían el mismo día. Juman y Kiki, gracias a sus colaboraciones de décadas con Diario de Cádiz, si son conocidísimos en todo Cádiz. Mi padre si plasmó la historia de Puntales en un periodo en concreto, pero ellos lo hicieron de Cádiz entero y además de acontecimientos históricos. Curiosamente recuerdo el tener a un hijo de Fariñas de compañero en EGB y a un hijo de Juman en FP.
Paralelamente a su trabajo aquí en Cadiz también lo tenía en Prado del Rey, donde sí era el único fotógrafo, y donde también durante muchos años (mediados de los 70 en adelante hasta los 80) realizó prácticamente todas las bodas y comuniones. Raro es la casa en su pueblo que no haya alguna fotografía que lleve su firma. Antiguamente no había esto de las marcas de agua, ni se firmaba digitalmente, era una pegatina (dorada) con su nombre, dirección y teléfono
FL: ¿Qué fotografías destacarías en la obra de tu padre?
- Todas y cada que le permitió que en mi casa nunca faltara de nada, pero a la vez humildemente. En lo personal, le tengo mucho cariño a todas las fotos familiares y en concreto a todas las que me hacía a mí, sobre todo en mis cumpleaños. Dalí tenía de musa a Gala y mi padre me tenía a mí, debo de tener cientos de fotos mías.
FL: ¿Tienes intención de mostrar en alguna exposición el trabajo de Diego? O en su defecto hacerle algún otro tipo de homenaje?
- El homenaje ya se lo llevo haciendo desde hace 5 años, desde que me publicaron en televisión la primera colaboración en un programa sobre el tiempo, en Antena3. Realmente Tornay es su segundo apellido, yo no lo tengo ni en el DNI, pero pensé que era una forma bonita de homenajearlo, que su apellido saliese, de alguna forma, en televisión. Ya van unas 250 colaboraciones emitidas.
De todas formas su trabajo sí que se ha visto premiado, tanto en el barrio de Puntales, otorgándole una placa de Vecino del barrio, como en su pueblo, Prado del Rey, donde cada año, en el día de Andalucía, dan un premio a un gremio determinado, y en el año 2009,dedicado a la fotografía, le dieron el título de Poblaor del año ,en 2009, que tuve que ir a recoger yo porque él ya estaba muy enfermo como para ir, de hecho falleció dos meses después, pero al menos consiguió verlo y lo tuvo en la mano (aunque ya no sabía qué era eso ni qué significaba).
Una entrevista de Manu.AM para Foro libre